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Existen distintos tipos con múltiples variedades. Los más cultivados son: piel de sapo, cantalupo, amarillo, galia y honey dew.
El melón para germinar en óptimas condiciones ha de tener una temperatura entre 12º-13ºC. Respecto al crecimiento, la temperatura óptima es de Para conseguirlas, por lo que su siembra tiene que hacerse de 3 a 4 semanas El crecimiento de la planta no es verdaderamente activo hasta que se sobrepasan los 15 °C, situándose el óptimo hacia los 32 °C, que lo convierte en una fruta muy resistente a la sequía, siendo capaz de resistirla durante un periodo prolongado y de volver a emprender su crecimiento cuando finaliza la sequía.
El melón no debe recogerse hasta estar seguros de que ha madurado para garantizar un alto contenido en azúcar, que le proporciona su característico dulzor.
El melón suele consumirse crudo, sólo, como aperitivo, como entrante o como postre en las comidas. También es utilizado como ingrediente para la elaboración de inumerables recetas para primeros y segundos platos. Puede consumirse sazonado con sal, pimienta, azúcar, mermelada, miel, etc. Se consume también en forma de compota, jarabe, mermelada, en almíbar, en su propio jugo o acompañado de embutido.
Del fruto del melón todo es comestible: la corteza, utilizada para la elaboración de confituras, las semillas consumidas como frutos secos o para la obtención de aceite y sobre todo la carne, bien como fruta o como hortaliza, en crudo o procesado, etc. También las flores, aunque es menos frecuente, son consumidas como alimento humano.
Dentro de las propiedades e indicaciones del fruto del melón, destacan las siguientes:
El consumo de melón ayuda a prevenir ciertas enfermedades como la gota y la artritis, el estreñimiento, colesterol (aporte de fibras) y la acidez estomacal.
Además del fruto, las semillas también aportan propiedades beneficiosas para el organismo. La infusión de semillas de melón actúa como un maravilloso regulador renal. Consumidas como frutos secos poseen un alto contenido en Vitamina P (flavonoides), relacionada directamente con la permeabilidad capilar, hemostasis y la antioxidación.
En síntesis, la riqueza en vitaminas A y B, así como la celulosa hacen del melón en un alimento saludable, refrescante, depurativo, desintoxicante y laxante. Efectúa un verdadero lavado biológico a nuestro organismo. Como bien dice el viejo refrán castellano "tajadas de melón, buena purga son".